“Dejemos la violencia y empecemos a dialogar”, esto es lo que Wilf Gasser, presidente de la Alianza Evangélica Suiza (SEA), dijo a los radicales que atacaron su casa a causa de su reciente participación en una “Marcha por la Vida”.

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Gasser tomó parte el pasado domingo en el evento anual para celebrar la vida humana. El evento reunió a unos 1.700 creyentes cristianos donde tuvieron música en directo y tiempo para orar juntos.

Los radicales pro-aborto en la ciudad de Berna organizaron contra-marchas y estuvieron amenazando a las organizaciones cristianas semanas antes del evento. La sede del partido popular evangélico (EVP-PEV) y una de las mayores iglesias evangélicas de la ciudad, la ICF, fueron atacadas con pintura.

El odio promovido en sitios web de los radicales de izquierda dio lugar a un ataque personal contra Gasser. Algunos dejaron grafitis en la puerta de su garaje con mensajes como: “Guárdese su fe para usted” y “Detenga la cruzada de la SEA”.

El grupo detrás de la campaña en contra de la "Marcha por la Vida" es famoso en la capital suiza.

Gasser ha ofrecido mantener una discusión abierta y pacífica con las personas que lo amenazaron y con otros cristianos. Sugiere sentarse alrededor de una mesa con los representantes de estos grupos radicales para abrir un diálogo acerca de sus visiones del mundo.

“Aceptaría la invitación” para ir a cualquier lugar que la parte contraria sugiriera, dijo.

El líder evangélico también desafió al principal periódico regional, el Berner Zeitung, a escribir un reportaje en el que los cristianos pudieran explicar claramente su posición en cuanto a la bioética.

“Las opiniones de los que nos llaman ‘homófobos’, ‘nazis’ y ‘anti-mujer’ son mucho mejor retratadas en los medios de comunicación que los resultados mundiales sobre el aborto o la selección genética de bebés sanos”, dijo.

Al comentar sobre la violencia contra algunos cristianos en Suiza, el representante evangélico añadió que muchos de los que simpatizan con estos grupos violentos están mal informados acerca de lo que los cristianos creen realmente.