Ministerio cristiano bendice a las madres encarceladas con reencuentros especiales en el Día de la Madre
El ministerio sin fines de lucro God Behind Bars (en español Dios tras las rejas) ofreció a las madres encarceladas el regalo de su vida este Día de la Madre: la oportunidad de pasar tiempo con los hijos que rara vez ven.
El ministerio penitenciario nacional trabaja continuamente para restaurar las vidas de los reclusos fortaleciendo su fe durante el encarcelamiento y después de su liberación. Y a través de sus programas de extensión, están trabajando para llegar a los más de 2,3 millones de personas en el sistema penitenciario.
Pero God Behind Bars no se limita a salvar a los reclusos y restaurar sus vidas, sino que va más allá y ayuda a reconstruir las relaciones rotas entre los reclusos y sus hijos.
Este Día de la Madre, madres que no habían visto a sus hijos en años se reunieron con ellos mientras pequeños pies y brazos extendidos corrían hacia madres con ojos llenos de lágrimas..
Las madres que no estaban en prisión tuvieron la oportunidad de pasar tiempo con sus hijas encarceladas.
«Ser madre en prisión no cambia el hecho de que siguen siendo madres», compartió el ministerio en Instagram. «¡Tienen valor y propósito en la vida de sus hijos! ¡Creemos en restaurar y reunir a las madres con sus hijos!».
Dos tercios de los padres en prisión nunca han recibido una visita de su familia y el 75% de los niños con un padre encarcelado tienen más probabilidades de terminar en prisión. Según un informe del Departamento de Justicia, más de un tercio de estos progenitores seguirán en prisión cuando sus hijos pequeños cumplan 18 años.
«ESTA ES NUESTRA LUCHA para romper el ciclo de encarcelamiento de las familias», explicó en una ocasión God Behind Bars.
Una madre encarcelada, que llevaba dos años y medio sin ver a sus cinco hijos, tuvo la oportunidad de pasar tiempo con ellos.
Pudo darle mochilas, regalos y cartas escritas a mano expresando cuánto los amaba.
«Guardaremos este momento para siempre», dijo God Behind Bars sobre la reunión. "¡Creemos que estos momentos rompen el ciclo de encarcelamiento generacional!"
Ministerio para las mujeres
A principios de este mes, God Behind Bars ministró a más de 300 mujeres en un correccional femenino.
Jake Bodine, director ejecutivo de God Behind Bars, compartió personalmente el Evangelio con las reclusas y más de 250 mujeres entregaron sus vidas a Jesucristo.
Bodine dijo a CBN News que fundó la organización en 2009 con la misión de "llegar a los más pequeños" y que se ha convertido en un movimiento de reactivación en los centros penitenciarios de todo el país.
"Las mujeres vinieron a orar, pidieron que oráramos para que sus adicciones a la metanfetamina se rompieran y pudieran perdonar a sus abusadores. Dios está rompiendo las fortalezas detrás de las rejas", compartió el ministerio.
God Behind Bars deja claro que su objetivo es difundir la esperanza que es el Evangelio de Jesucristo de celda en celda.
«No nos detendremos ante nada, asegurándonos de que cada recluso en los EE. UU. tenga acceso directo y personal al Evangelio y a los recursos espirituales, no sólo para ayudarles a crecer en su fe, sino también para curar traumas y heridas, romper adicciones y ciclos, y permitirles entrar en su vocación como hijos e hijas del Altísimo», se lee en su página web.