El presidente Donald Trump anunció el jueves que está creando un grupo de trabajo dirigido por el Departamento de Justicia para "erradicar el sesgo anticristiano" dentro del gobierno federal. 

El presidente hizo el anuncio en un evento privado después del 73º Desayuno Nacional de Oración anual, su segundo discurso en el desayuno de oración de la mañana. 

La fiscal general Pam Bondi liderará el esfuerzo y detendrá inmediatamente "todas las formas de persecución y discriminación anticristiana dentro del gobierno federal", incluso en el Departamento de Justicia, el IRS y el FBI, dijo Trump.

Bondi también trabajaría para "perseguir plenamente la violencia anticristiana y el vandalismo en nuestra sociedad y mover cielo y tierra para defender los derechos de los cristianos y los creyentes religiosos en todo el país".

Trump dice que planea lanzar la iniciativa con una orden ejecutiva que planea firmar el jueves por la tarde. 

Los grupos religiosos elogian al presidente por crear una comisión para proteger la libertad religiosa. 

Ralph Reed, presidente de la Coalición Fe y Libertad , dijo en una declaración: "A raíz de que el Departamento de Justicia de Biden haya puesto en la mira a los padres que asisten a las reuniones de las juntas escolares para un posible procesamiento y el FBI haya puesto en la mira a los católicos fieles como una posible amenaza interna, nunca ha sido más importante erradicar todas las formas de persecución, prejuicio y discriminación basadas en la fe a nivel federal".

"Los 3 millones de miembros y simpatizantes de la Coalición Fe y Libertad apoyan firmemente al presidente Trump en su defensa de la libertad religiosa y los derechos de los cristianos estadounidenses", continúa la declaración. 

Hoy temprano, Trump se dirigió a los legisladores en el 73º Desayuno Nacional de Oración en el Capitolio destacando la importancia de la fe. 

"Desde el comienzo mismo de nuestra República, Estados Unidos siempre ha sido una nación fundada por personas de fe y fortalecida por el poder de la oración, unidas por cuatro palabras simples pero hermosas: 'En Dios confiamos'", dijo. 

Trump dijo que cree que la gente "no puede ser feliz sin religión, sin esa creencia. Traigamos de vuelta la religión. Traigamos de vuelta a Dios a nuestras vidas".

El 47º presidente agregó que también está formando una oficina religiosa en la Casa Blanca dirigida por la reverenda Paula White, quien se desempeñó como asesora religiosa durante su primer mandato.