Operación Bendición alista a todo su equipo para desplegar ayuda en Jamaica tras el paso del huracán Melissa.
Tras el paso del huracán Melissa, categoría 5, en Jamaica, que dejó decenas de personas afectadas por las inundaciones y lluvias, la organización Operación Bendición alista a todo el personal para hacerse presente en las zonas afectadas y brindar su apoyo.
“No sabemos la magnitud de la catástrofe, si el agua bajará, si los aeropuertos abrirán y cuándo lo harán”. “Así que, por ahora, nos estamos preparando lo más cerca posible de la isla y rezamos para que la suerte nos acompañe y podamos viajar en avión, ya sea privado o comercial”, dijo Diego Traverso, director senior del Equipo Global de Respuesta a Desastres de Operación Bendición.
Parte de la preparación del equipo OB se basó en suministros de ayuda humanitaria como agua, alimentos, lámparas solares y kits de higiene, así como cloradores y unidades de purificación de agua para obtener agua potable limpia.
Asimismo, uno de los principales desafíos que enfrentarán es el traslado a la zona, ya que aún no cuentan con información del gobierno jamaiquino sobre el estado de las rutas o si los aeropuertos volvieron a funcionar.
Según declaró Richard Thompson, director general interino de la Oficina de Preparación para Desastres y Gestión de Emergencias de Jamaica a la AP NEWS, los apagones y las inundaciones dificultaron la evacuación de las personas a los albergues.
Aproximadamente 500.000 personas fueron evacuadas de las zonas vulnerables a los vientos y las inundaciones mientras la poderosa tormenta avanzaba por el Caribe.
Los habitantes de las islas caribeñas catalogaron la situación como catastrófica tras el paso de Melisa, donde algunos intentan volver a sus hogares y ver si aún les queda algo en pie.
Los expertos aseguraron que los vientos en la isla caribeña alcanzaron los de 185 mph (295 km/h), siendo considerado como uno de los huracanes del Atlántico más intensos jamás registrados.

