Trump destaca el caso de un niño de 12 años obligado a adoctrinar a un alumno de kínder en ideología de género
El presidente Trump ajusta el micrófono para Shea Encinas mientras habla en la reunión de la Comisión de Libertad Religiosa de la Casa Blanca en el Museo de la Biblia, el 8 de septiembre de 2025, en Washington. (Foto AP/Alex Brandon)
WASHINGTON, D.C. – El presidente Trump celebró el lunes la primera reunión de su nueva Comisión de Libertad Religiosa en el Museo de la Biblia. Su primera iniciativa es proteger la oración en las escuelas públicas, centrándose más ampliamente en la libertad religiosa de los estudiantes.
"Tenemos que recuperar la religión en Estados Unidos, recuperarla con más fuerza que nunca", dijo el presidente al inaugurar el evento ante un público repleto de representantes de distintas confesiones.
Dijo que su administración quiere promover la libertad religiosa y que, a medida que se acerca el 250º aniversario de la fundación de Estados Unidos, la nación debe recordar el importante papel que desempeñó la fe desde el principio.
"Estados Unidos se fundó sobre la fe, como sabemos, y lo llevo diciendo mucho tiempo: cuando la fe se debilita, nuestro país parece debilitarse", dijo Trump.
El Presidente señaló que su administración ha ampliado la elección de escuelas, protegido los derechos de los padres y anunció que pronto dará al Departamento de Educación directrices para traer de vuelta la oración a las escuelas.
Durante la mayor parte de la historia de nuestro país, la Biblia estuvo presente en todas las aulas. Sin embargo, hoy en día, en muchas escuelas, se adoctrina a los estudiantes con propaganda antirreligiosa, y algunos son castigados severamente por sus creencias religiosas. Es ridículo.
Trump también invitó a Sheay Encinas, de 12 años, de California, a hablar sobre su escuela que lo obliga a leer un libro que promueve la ideología transgénero, lo cual entra en conflicto con su fe cristiana.
"El año pasado, en quinto grado, obligaron a Shay a leerle a un estudiante de jardín de infantes un libro que promovía un mensaje de ideología de género radical que es contrario a sus creencias religiosas y a las nuestras", explicó Trump.
Entonces Shay también se dirigió a la multitud. "Creo que los niños como yo deberían poder vivir nuestra fe en la escuela sin que se les obligue a ir en contra de nuestras creencias", dijo. "Espero que ninguna otra familia tenga que pasar por lo que pasó la mía".
Aunque el Presidente recibe un amplio apoyo de su base, los críticos argumentan que esta política, sus comentarios y la Comisión de Libertad Religiosa sólo promueven una agenda llamada "nacionalista cristiana".
Jenny Korn, directora de la Oficina de Fe de la Casa Blanca, contrarresta esa acusación señalando a los miembros de la comisión.
"Somos personas de fe. Tenemos judíos, imanes, cristianos y católicos. Queremos asegurarnos de que todos entiendan que la fe abarca a personas de todas las confesiones, de todos los orígenes, porque sobre eso se fundó este país: la libertad de fe. Por eso representamos a personas de todas las confesiones", dijo.
El presidente Trump promete mantener su compromiso de proteger la libertad religiosa de las personas de todas las religiones, afirmando que para que Estados Unidos sea una gran nación, siempre debe ser una nación bajo Dios.