JERUSALÉN, ISRAEL – Luego de años de preparación y meses de especulación, Israel ejecutó una operación militar sin precedentes contra su principal enemigo: Irán. La ofensiva, denominada Operación León que Se Alza, incluyó ataques a instalaciones nucleares clave en Teherán y otras ciudades, así como la eliminación de científicos nucleares y altos mandos militares iraníes.

El primer ministro Benjamín Netanyahu se dirigió a la nación y al mundo al inicio de la operación. “Esta operación continuará todos los días que sean necesarios para eliminar esta amenaza”, declaró. “Durante décadas, los tiranos de Teherán han clamado abiertamente por la destrucción de Israel. Hoy, respaldaban esa retórica con un programa activo para desarrollar armas nucleares”.

Netanyahu advirtió que Irán estaba a punto de fabricar su primera bomba atómica. “Podrían lograrlo en meses, incluso en menos de un año. Es una amenaza clara y presente para la supervivencia de Israel”, enfatizó.

El ataque israelí se produjo en el día 61, justo después de que el expresidente estadounidense Donald Trump diera a Irán un plazo de 60 días para detener su programa nuclear. El secretario de Estado, Marco Rubio, confirmó que EE.UU. no participa directamente en la ofensiva.

Según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), los aviones de combate atacaron sitios estratégicos como Natanz e Isfahán. También confirmaron la eliminación de altos mandos iraníes, incluidos el comandante de las Fuerzas Armadas Muhammad Bagheri, el jefe de la Guardia Revolucionaria Hossein Salami y el comandante de Defensa Aérea Ghulam Ali Rashid, así como varios científicos del programa atómico.

En respuesta, Irán lanzó cientos de drones, aunque la mayoría fue interceptada por las FDI. El líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, prometió represalias severas.

El experto en terrorismo global Dr. Amir Amidi explicó a CBN News que, aunque hay silencio público en ciudades como Teherán, Isfahán y Shiraz, muchos iraníes sienten alivio en privado. “Una creciente parte de la sociedad culpa al régimen por arrastrar al país a la guerra y al aislamiento internacional. Muchos piensan que este podría ser el principio del fin del régimen”.

Al concluir su mensaje, Netanyahu citó a Moisés: “Hace más de 3,000 años, Moisés dio al pueblo de Israel un mensaje que ha fortalecido nuestra determinación: ‘¡Sé fuerte y valiente!’”. Y añadió: “Hoy nuestros soldados y nuestro pueblo se levantan para defendernos y, al hacerlo, defienden a muchos otros”.

El jueves, Netanyahu oró en el Muro Occidental y colocó un papel con un versículo de Números 23: “He aquí el pueblo que como león se levantará, Y como león se erguirá”.